El desfile de Balmain, un evento que marcó un hito en la industria de la moda, se caracterizó por una amplia gama de colores, desde los rosas chicle hasta el vibrante verde pistacho. Las faldas largas y plisadas, así como los abrigos adornados con flores, dominaron la pasarela.
El momento culminante llegó cuando una modelo desfiló luciendo un espectacular vestido confeccionado íntegramente con rosas rojas de efecto vinilo, acompañado por un bolso y zapatos a juego. La creatividad y la maestría artesanal de la marca se hicieron evidentes en cada detalle.
En un gesto de profundo compromiso con su oficio, un modelo desfiló llevando un armazón, similar a los utilizados por los modistos, decorado con hermosas flores pintadas. Este acto fue una declaración de lealtad a la artesanía y la dedicación de todo un equipo.
Olivier Rousteing, el director artístico de Balmain, reveló en su cuenta de Instagram que su equipo había trabajado incansablemente, día y noche, para hacer posible este desfile que marcaría un antes y un después en la historia de la marca.
Tras el desfile, Rousteing salió a la Plaza del Trocadero para saludar a sus seguidores que habían seguido el evento a través de pantallas gigantes. La majestuosa Torre Eiffel se erguía en el horizonte, centelleando en todo su esplendor.
Un Robo Inusual en el Mundo de la Moda
Sin embargo, antes del desfile, ocurrió un incidente inusual en el mundo de la moda. A mediados de septiembre, una furgoneta que transportaba piezas de la colección de Balmain fue asaltada mientras se dirigía desde el aeropuerto hacia la sede parisina de la marca. Los ladrones, armados, lograron escapar.
La policía inició una investigación, pero hasta el momento se desconoce el paradero de las prendas robadas. Este tipo de robos es extremadamente raro en la industria de la moda, recordando el incidente en 2011 cuando el diseñador estadounidense Marc Jacobs perdió su colección tras un robo en un tren entre París y Londres.
A pesar de este obstáculo, Balmain cuenta con talleres, subcontratistas y una red de artesanos, lo que hace posible la recuperación de las prendas, ya que existen patrones para volver a confeccionarlas. Serge Carreira, experto en moda y lujo, afirmó que movilizando todos los recursos adecuados, la casa Balmain podría lograrlo.
La Transformación de Balmain y el Legado de Rousteing
Olivier Rousteing, a sus 38 años y con doce de experiencia como director artístico de Balmain, ha llevado a cabo una transformación impresionante de la marca. Ha convertido el desfile de esta casa de lujo francesa, antes conocida solo por un círculo selecto, en un evento de la jet-set.
Rousteing ha introducido elementos del hip-hop en la moda de Balmain, ha promovido castings que destacan la diversidad y ha colaborado con gigantes de la moda como H&M en 2015. A diferencia de la mayoría de los diseñadores que prefieren la discreción, Rousteing aboga por una estética glamurosa que comparte con sus 10 millones de seguidores en Instagram.
Este talentoso diseñador, de origen etíope y somalí, tiene una historia de vida impactante. Criado por una familia francesa después de no conocer a sus padres biológicos, Rousteing es uno de los pocos creadores negros o mulatos que han dejado una huella significativa en el mundo del lujo.
En 2019, protagonizó un conmovedor documental titulado «Wonder Boy», en el que relató su búsqueda de su madre biológica, una historia que inspira y conmueve a todos aquellos que conocen su trayectoria. Balmain, bajo la dirección de Rousteing, ha experimentado una evolución asombrosa que ha revolucionado el mundo de la moda y continuará siendo un faro de creatividad y diversidad en el futuro.
Adaptado de AFP.
