Galápagos es sinónimo de evolución, la muestra viviente de la belleza en la naturaleza, sin embargo sus riquezas naturales están amenazadas por agentes externos que ven en el dinero , motivo suficiente para destruir un ecosistema irrepetible, que forma parte del patrimonio mundial.
En los últimos años, las flotas pesqueras industriales han estado amenazando el paraíso Islero, aunque los límites del archipiélago podrían convertirse en una reserva marina internacional para evitar su destrucción y ser un ejemplo mundial de conservación de los océanos.
La ONG, Greenpeace, encabezó una expedición alrededor de las islas del Pacifico con el fin de promover el plan de protección. Una posibilidad que está vigente desde 2023, cuando las Naciones Unidas en conjunto a 80 países, dictaron un tratado para la protección de la biodiversidad en aguas internacionales. No obstante, sólo dos de las 60 naciones necesarias, lo han ratificado hasta la fecha.
Ya existen 200.000 kilómetros cuadrados de aguas protegidas en la reserva marina de Galápagos, siendo una de las mayores biodiversas, con alrededor de 2.900 especies, de las cuales el 25% son endémicas: «Probablemente el mejor proyecto de conservación llevado a cabo en los océanos» mencionan científicos de Greenpeace.
La importancia de las Islas Galápagos, no solo radica en su legado histórico, sino también en sus misterios naturales, que se siguen investigando. Este es uno de los muchos motivos por los que Greenpeace pidió la creación de una reserva marina mundial en alta mar junto a las islas Galápagos, con el afán de frenar el impacto de las flotas pesqueras industriales.
Adaptado AFP
El Tigre del Himalaya se está adapta a nuevas alturasLa presión humana y el cambio climático están alterando el hábitat del tigre del Himalaya, llevándolos a vivir a altitudes inusuales de casi 4.000 metros. A diferencia de la pantera de las nieves, que naturalmente habita en grandes alturas, los tigres de Bengala suelen preferir los bosques en los valles del macizo. Sin embargo, imágenes captadas por aparatos fotográficos automáticos en Sikkim, Himalaya indio, muestran tigres a alturas de hasta 3.966 metros, según reveló el Instituto de Vida Silvestre de India (WII).
Este fenómeno no es exclusivo de la región de Sikkim; en Nepal y Bután también se han reportado avistamientos de tigres a más de 4.000 metros. El aumento de las temperaturas en las alturas en las últimas dos décadas ha creado la posibilidad de un «nuevo hábitat» para el tigre, según señala Pranabesh Sanyal, experto en tigres.
Shrikant Chandola, otro especialista, destaca que la disminución en el número de presas ha llevado a los tigres jóvenes a expulsar a los más viejos de los mejores territorios, lo que ha aumentado la agresividad de los tigres hacia los humanos.
Estos conflictos han llevado a incidentes trágicos, como el ocurrido en enero cerca de Corbett, en Uttarakhand, donde un ataque de tigre causó tres muertos y dos heridos, lo que provocó indignación en la población local. Ante esta situación, el director de la reserva de tigres del Estado de Uttarakhand, Dheeraj Pandey, ha intensificado las campañas de prevención para evitar nuevos incidentes, aunque reconoce que no se puede ordenar a un tigre que se retire a otro lugar.
Adaptado de AFP.