La Liga de Quito, a pesar de jugar con un hombre menos durante toda la segunda mitad debido a la expulsión de Alexander Alvarado, logró resistir y ganar la emocionante tanda de penales por 4-5 contra el equipo de Sao Paulo. Con esta victoria, avanzaron a las semifinales de la Copa Sudamericana 2023, donde se enfrentarán a Defensa y Justicia de Argentina. Aunque el equipo paulista logró igualar la eliminatoria en el tiempo reglamentario con un marcador de 1-0, quedaron a las puertas de repetir la final del año anterior debido a un fallo crucial en un penal ejecutado por James Rodríguez, quien pasó de héroe a villano en una noche emocionante en el Morumbí.
El mediapunta colombiano contribuyó al único gol del partido al asistir desde un córner al ecuatoriano Robert Arboleda, quien anotó de cabeza en el minuto 77, forzando así la decisión a la lotería de los penales después de la derrota por 1-2 en Quito.
El equipo de Liga de Quito generó oportunidades peligrosas en contraataques, demostró su capacidad para resistir en desventaja numérica durante la segunda mitad y mostró una ejecución impecable en la tanda de penales, marcando los cinco tiros, incluyendo uno anotado por el peruano Paolo Guerrero.
El entrenador del São Paulo, Dorival Junior, optó por no iniciar el partido con el esperado «cuarteto mágico», dejando a James Rodríguez en el banquillo. En su lugar, el trío conformado por Calleri, Luciano y Lucas Moura saltó al campo y se destacó como el mejor de los jugadores paulistas.
Las primeras oportunidades de los brasileños fueron desperdiciadas, en particular por Luciano y Calleri, quien tuvo una actuación inusualmente opaca en el área. Mientras tanto, Liga de Quito no se quedó inactivo, utilizando el contraataque y la pérdida de tiempo para ralentizar el reloj, estrategias dirigidas por el argentino Luis Zubeldía. Un jugador que se destacó en esta táctica fue Jhojan Julio, un talentoso jugador físicamente dotado que constantemente causó problemas a la defensa rival.
En un momento sobresaliente, Julio realizó una corrida en solitario desde el centro del campo que culminó en un disparo ajustado al poste, pero Rafael, el portero brasileño, respondió de manera brillante. Además, en el primer minuto del partido, Rafael hizo otra excelente parada ante un disparo potente de Alvarado.
Guerrero también contribuyó al equipo, manteniendo la posesión de espaldas, una de sus especialidades. El São Paulo se enfocó en gran medida en Lucas Moura, quien regresó al equipo y demostró ser un nivel por encima de sus compañeros, aunque en ocasiones se vio obstaculizado por ellos en jugadas de peligro.
Sin embargo, a pesar de los esfuerzos, el equipo brasileño no pudo vencer a Alexander Domínguez en la primera mitad del partido. El segundo tiempo comenzó con ventaja para los brasileños después de la expulsión de Alvarado debido a una falta fea sobre Alisson.
Jugando en desventaja numérica, Liga de Quito se replegó para resistir la presión de Sao Paulo. Alisson lideró la ofensiva local con un potente disparo desde fuera del área que golpeó el poste. Arboleda, completamente solo en el área, desperdició la oportunidad al enviar su remate por encima del travesaño.
El gol parecía esquivo y, con media hora por jugar, Dorival llamó a James Rodríguez, conocido por su habilidad en espacios reducidos. Sin embargo, el gol aún no llegaba y la ansiedad comenzó a apoderarse de los jugadores brasileños. Calleri, de manera sorprendente, no pudo aprovechar un pase en el área pequeña.
En un momento crucial, James Rodríguez cobró un saque de esquina perfecto que Arboleda, desviando el balón entre tres defensores, remató de cabeza. El desvío de Adé desconcertó a Domínguez y el balón se deslizó por la línea de gol antes de entrar en la portería.
En un giro irónico del destino, un jugador ecuatoriano condenó al equipo ecuatoriano. Sin embargo, el São Paulo no pudo completar la remontada y la eliminatoria se decidió en la tanda de penales, donde James Rodríguez, exjugador del Real Madrid y el Bayern Múnich, envió su lanzamiento por encima de la portería de la capital paulista, lo que representó una amarga decepción para el colombiano y una celebración efusiva para Liga de Quito.
Adaptado de AFP.