El miércoles 8 de mayo, Joselu anotó dos goles que llevo al Real Madrid a la final de la Champions, tras remontar y ganar 2-1 sobre la campana al Bayern de Múnich en la vuelta de semifinales del torneo europeo.
Tras el 2-2 de la ida en Múnich, Alphonso Davies abrió el marcador para el Bayern en el minuto 68, pero los dos goles de Joselu en los minutos 88 y 90, dieron al Real Madrid el billete a Wembley, donde se enfrentarán en la final contra el Borussia Dortmund, que la víspera se impuso al París Saint-Germain.
Tras un nuevo ejercicio de resistencia, el Real Madrid, vuelve a una final de Champions dos años después de la que ganó al Liverpool en París, para levantar su decimocuarto título de campeón de Europa.
«Ha pasado otra vez, es algo inexplicable, es la magia de este club, de una afición que empuja en un estadio fantástico y unos jugadores que no paran de creer que se puede hacer algo mágico», dijo Carlo Ancelotti, preguntado por una enésima remontada.
Los merengues pudieron adelantarse pronto en el partido, con un balón de Dani Carvajal que se paseó por delante de la línea de gol sin que pudiera llegar Rodrygo (6′).
El Bayern respondió con un pase en profundidad a Serge Gnabry, que soltó un tiro demasiado cruzado (8′).
El equipo alemán se vio empujado en la primera media hora hacia su campo por el Real Madrid.
Al cuarto de hora, Vinicius se topó con el poste y el rechace lo remató Rodrygo en boca de gol, para lucimiento del portero Manuel Neuer (13′).
Los dos brasileños fueron una pesadilla para la defensa bávara, pero no lograban superar al portero del Bayern.
Vinicius estuvo a punto de sorprender a Neuer con un centro que se envenenó, pero que el meta alemán envió a córner (40′).
«Lo que ha aportado (Vinicius) en esta semifinal lo pueden hacer muy pocos jugadores, ahora queda una final en la que va a ser protagonista», dijo Ancelotti.
Tras la pausa, el Bayern salió más amenazante, con un nuevo aviso de Kane que Lunin despejó (54′).
El Bayern empezó a llegar más con sus hombres rápidos, como el tiro de Jamal Musiala, que sacó Lunin (66′).
Polémica final
El meta ucraniano del Real Madrid no podría hacer nada poco después cuando Davies llegó por el costado, recortó a Rüdiger y soltó un disparo cruzado a la escuadra, imparable (68′).
El Real Madrid tuvo la ocasión del empate en un autogol del Bayern de Múnich, pero una falta previa de Nacho anuló el tanto tras una revisión en el VAR (71′).
La victoria alemana parecía segura, pero sobre la campana Neuer no logró bloquear un disparo de Vinicius y el rebote lo remató Joselu en boca de gol para empatar (88′).
Apenas dos minutos después, el delantero merengue remató un centro de Rüdiger para hacer el 2-1 (90′).
Inicialmente anulado por fuera de juego, el gol fue validado tras una revisión del video arbitraje.
El descuento fue un nuevo ejercicio de resistencia ante un Bayern lanzado a la desesperada que vio cómo no se le concedía un gol a Matthijs de Ligt con el tiempo ya cumplido, por un fuera de juego anterior (90+10).
«Debe dejar seguir la jugada hasta el final. Es la regla, más aún cuando es una jugada de gol y que está al límite. El primer error es del juez de línea, el segundo es del árbitro. Esta decisión es un desastre absoluto», criticó Tuchel.
Adaptado AFP