El Liverpool se llevó la victoria en Wembley tras vencer al Chelsea 1-0 en la prórroga, marcando así su primer título desde 2022.
El gol decisivo llegó en el minuto 118, cuando el defensa neerlandés Virgil Van Dijk conectó un cabezazo al arco tras un certero centro al área. Esta victoria representa solo el primero de los cinco posibles títulos para los «Reds», quienes actualmente lideran la tabla de la Premier League y mantienen viva su esperanza en la Europa League y la Copa de Inglaterra.
«Estoy realmente orgulloso de mi equipo; todos cumplimos nuestro papel a pesar de los obstáculos», comentó Van Dijk a Sky Sports tras el partido.
La victoria adquiere un significado especial debido a las numerosas lesiones que han afectado al equipo desde el inicio de la temporada, lo que llevó a que el Liverpool alineará a varios jóvenes, algunos de ellos menores de 20 años, en la final, algo inusual en estas instancias.
A pesar de las múltiples oportunidades que tuvo el Chelsea frente al arco rival, el equipo no logró capitalizarlas. En el segundo tiempo, los dirigidos por Pochettino atacaron constantemente con claras ocasiones de gol, aunque la destacada actuación de Caoimhín Kelleher en la portería hizo olvidar la ausencia de Alisson Becker.
El ecuatoriano Moisés Caicedo disputó todo el encuentro con un gran desempeño en el medio campo, filtrando pases clave en el ataque y brindando apoyo en la defensa de los «Blues», aunque aún espera su momento para ganar un título en Inglaterra.
Con esta victoria, el Liverpool suma su décima Copa de la Liga, convirtiéndolo en el máximo ganador de la competición con 10 títulos, superando los 8 trofeos del Manchester City.
Ahora, la Copa de Inglaterra se presenta como la única oportunidad para el Chelsea de salvar una temporada que prometía más, especialmente después de la fuerte inversión realizada por el equipo. Mientras tanto, para el Liverpool, este logro podría marcar el inicio de una gran temporada en el último año de Klopp como director técnico.
Adaptado de AFP.