El Centro de Acogida de Animales de Bristol, en Inglaterra, se ha enfrentado al creciente problema de abandonos de perros y gatos de manera ingeniosa: planea una subasta de cuadros pintados por las propias mascotas para recaudar fondos y continuar con su valiosa labor.
En las instalaciones del Animal Rescue Centre (ARC) en Bristol, dos perras, ‘Rosie’ y ‘Alba’, trabajan incansablemente en sus creaciones artísticas sobre lienzos. Su enfoque no requiere pinceles, solo sus hocicos y patas ágiles. A pesar de que el resultado puede parecer abstracto o caótico, su propósito supera con creces cualquier crítica artística.
El incremento en el abandono de mascotas en el Reino Unido se ha visto impulsado por la inflación y el alza en las tasas de interés, lo que dificulta a las personas costear el seguro y la atención veterinaria necesarios, según Bee Lawson, especialista en comportamiento animal del ARC.
La RSPCA del Reino Unido ha expresado su preocupación ante este aumento en los abandonos de animales a medida que se acerca el invierno. Entre enero y octubre, se reportaron 17,838 casos de animales abandonados en Inglaterra y Gales, un número que podría alcanzar los 21,500 en 2023 si esta tendencia continúa, un aumento significativo desde alrededor de 16,000 en 2020, según Dermot Murphy, comisionado de inspección de la RSPCA.
Frente a esta crisis, el ARC, financiado de forma independiente aunque asociado a la RSPCA, ha tenido que buscar formas creativas de recaudar fondos. Una de sus ideas es organizar una «Gala de perros callejeros» en línea a principios de diciembre, donde se subastarán las obras de arte creadas por estos animales.
Estas pinturas, algunas valoradas en alrededor de 50 libras (63 dólares), alcanzan precios de hasta 320 libras (403 dólares) por cuadros como los del perro husky blanco ‘Major’.
Según Bee Lawson, la pintura se ha convertido en una terapia eficaz para los perros traumatizados por el abandono, ya que actividades como olfatear, lamer y masticar la tela tienen efectos calmantes en ellos.
Los cuidadores del ARC utilizan mantequilla de maní y queso para atraer a los perros hacia los lienzos, fomentando así su creatividad mientras exploran y juegan con su comida.
Jodie Bennett, directora del centro, destaca a ‘Major’, el husky blanco, como uno de los artistas más populares, cuyas obras han despertado gran interés en críticos y coleccionistas de arte. Bennett describe las pinturas como audaces y reflejo de la personalidad del animal, considerándolo un prometedor artista en desarrollo.
Una gata llamada ‘Cammie’ sorprendió al crear una obra titulada ‘Burning Man’ con colores intensos durante una sesión de pintura, revelando su pasión. Bennett expresa su orgullo por estos animales y su deseo de exhibir estas obras en sus propias paredes.
La visión a largo plazo incluye la esperanza de la directora del centro de que, con entrenamiento y dedicación, estas obras puedan algún día ser exhibidas en la Tate Gallery de Londres.
Adaptados de AFP.